En Fuente del Prao no se desperdicia nada, aprovechamos nuestros recursos a tope. Nos hacen falta estacas para vallar y poner de guía a los tomates, pues sacamos serrucho y destral y nos ponemos a ello.
Estos árboles llevan tiempo siendo usados como perímetro del huerto, así que nos servimos de ellos. No solo eso, sino que al mismo tiempo limpiamos de maleza el tercer y más alto de los estanques que pueblan esta finca.
Otro estanque soterrado por el paso del tiempo que en un primer momento ante las pérdidas de agua del nuestro, pensamos en él como refuerzo.
Si las siembras continúan y se amplían, no descartamos volver a él en entregas futuras y presentar batalla para defender a muerte este lejano estanque.
Con la tala, ya tenemos parte de las estacas y un número de palos que nos valdrán para reforzar el perímetro, recordemos que tras esas paredes acechan criaturas salvajes que amenazan con comer nuestras plantas y retozar en ellas. Como buenos guardianes del muro hemos de sellar y proteger nuestras defensas, esta madera nos lo permitirá.
Seguimos creciendo, nuestra ilusión no decae, vuestros apoyos cada vez con más, y se agradece.
Hasta la semana que viene.
LEVANTO MI AZADA Y GRITO
AU, AU, AU, AU...
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